En este momento estás viendo Conociendo Tiedra

Conociendo Tiedra

El sábado pasado decidimos en un arrebato de esto que no tienes nada que hacer…  Decidimos poner rumbo y disfrutar conociendo Tiedra ¿por qué no conocer la pequeña Provenza de Valladolid? Pues dicho y hecho… nos fuimos a Tiedra a disfrutar de su historia y sus campos de lavanda… ¿Te animas?

Castillo de Tiedra

Una de las visitas fundamentales es su Castillo. Los padres habíamos estado hace ya muchos muchos años viéndolo, pero desde que lo han rehabilitado no habíamos ido a verlo de nuevo por dentro… y ya tocaba! Más si cabe, después del mega curro de la Edad Media de la mayor este año en historia.

Nos dejó sin palabras… Una visita súper recomendable! Se puede visitar por tu cuenta (2€) o en visita guiada, como fuimos sin planearlo, pues nos toco visitarlo por nuestra cuenta. Pero está muy bien diseñado para ser visitado por libre, con numerosos carteles que lo explican de una manera súper amena.

Conociendo Tiedra

Historia del Castillo de Tiedra:

La primera mención al castillo es de la época de Sancho II de Castilla (siglo XI), cuando éste ordena a Rodrigo Díaz de Vivar (el Cid) que se entreviste con su hermana Doña Urraca para que cediese la ciudad de Zamora a cambio de Medina de Rioseco y el infantado de Valladolid incluyendo el castillo de Tiedra.

El Cid no consigue la capitulación de Doña Urraca y Sancho II se ve obligado a sitiar la ciudad de Zamora, muriendo en este sitio. En la separación de los reinos tras la muerte de Alfonso VII, Tiedra pasó a manos leonesas, pero pronto volvió a poder castellano, ya que Alfonso IX se lo entregó a Doña Berenguela en compensación tras su divorcio.

En 1285 Sancho IV de Castilla donó la villa de Tiedra a Don Pedro Álvarez de Asturias, junto con otras posesiones, que heredaría su hija Teresa Pérez, que se casó con Alfonso de Meneses, por lo que finalmente Tiedra pasó a manos de la poderosa familia castellana de los Meneses.

Tras la muerte del último Meneses, sin descendencia, el rey otorgó sus posesiones a la familia de los Alburquerque. Leonor de Alburquerque, se casó con el Infante Fernando de Antequera y fue la madre de los Infantes de Aragón, a quienes el rey Juan II confiscará la Villa en 1430.

A mediados del siglo XV, Juan II entregó la villa a Don Pedro Girón, con lo cual pasará a formar parte de la Casa de Osuna, como confirmarán los Reyes Católicos después de la batalla de Toro en 1476. En posesión de esta familia estará hasta el siglo XIX.

El ayuntamiento compró la fortaleza en el año 2004.

Conociendo el Castillo de Tiedra:

El castillo de Tiedra tiene su origen en la primitiva torre defensiva de la población a la que se fueron añadiendo defensas y construcciones auxiliares desde el s.XII hasta el XV, dando como resultado la fisonomía actual.

Tiene diferentes plantas que ahora se han recuperado, la visita es muy amena y didáctica, las peques salieron encantadas, sobre todo la mayor que vio de primera mano todo lo estudiado este año en historia.

  • Sala subterránea que pudo utilizarse como mazmorra o almacén y que ahora está súper bien recreada… dando algún que otro pequeño susto al visitante…

  • La planta baja originalmente albergaría las dependencias del cuerpo de guardia. Su acceso está rematado por un arco de medio punto cegado cuya prolongación interior forma una bóveda de cañón rebajada donde se ubicaría una doble puerta. Se pueden observar los anclajes de sendas puertas así como los huecos para sus respectivos trancos.
  • La planta primera,  perdió su viguería original a finales del siglo XIX al igual que la escalera de piedra embutida en el muro sur, cuyo arranque se observa desde este nivel. En el siglo XX, la torre se utilizó como un palomar por lo que se construyeron unas paredes de adobe para albergar los nidos. Se trata de una sala de carácter austero con una puerta rematada con arco de medio punto cegado, serían las dependencias del Alcaide.
  • La segunda planta, ha conservado parte de la estructura de madera que sustentaba la escalera que sustituyó a la original, así como unas impresionantes vigas de varios siglos de antigüedad. Ahora alberga un repaso a la historia de castillo y una maqueta espectacular de cómo debió ser la localidad en la Edad Media.

  • La tercera planta, era la sala de recepciones donde el señor despacharía los asuntos de la administración e impartiría justicia, presenta amplios ventanales ajimezados. Lo más destacable es sin duda la esbelta bóveda ojival reforzada por arcos fajones que descansan sobre cuatro ménsulas diferentes. En la cara oeste, se abre una pequeña puerta flanqueada por un arco que remata en dos hermosos capiteles. Ésta da acceso a una escalera de caracol a través de la cual se sube, cuidado al bajar pues algunos de los peldaños están súper desgastados.
  • La cubierta de la de la torre está rematada por almenas, donde se ha recreado lo que fue su sistema defensivo vertical basado en buhardas de madera apoyadas sobre matacanes de piedra en sus cuatro lados, característica de la torre de Tiedra. Restaurado el almenado de la torre, es necesario acceder a la cubierta desde la garita de la escalera de acceso hecha de ladrillo. Super recomendable subir para apreciar la belleza del paisaje castellano.

Si os gustan los castillos, en Valladolid hay muchos y muy bonitos e interesantes, por ejemplo aquí os dejo unos cuantos.

Pero no todo va a ser culturizarse… por una vez, íbamos buscando la foto tal cual instagramers…

Campos de Lavanda

Desde hace unos años, Tiedra se está convirtiendo en la pequeña Provenza de Valladolid con sus campos de lavanda… así que si eres un friki de las fotos, el postureo… es tu lugar y es la época!

Conociendo Tiedra

En Tiedra, podrás conocer diferentes cultivos de lavanda. Al ser al aire libre, se pueden visitar pero por favor, desde la prudencia y el respeto, pues no dejan de ser cultivos particulares y no se merecen que nadie se los destroce. También es muy importante tener en cuenta que la mejor hora para visitarlos es a la caída del sol, para que haya menos abejas… nosotros aún así vimos bastantes así que cuidado!

La lavanda es una de las plantas más conocidas y reconocibles en nuestra cultura. Su imagen se ha convertido en icono de la naturaleza, de sus valores y beneficios. Valorada desde la antigüedad por sus múltiples propiedades, a lo largo de la historia los botánicos han identificado y descrito las diferentes especies, subespecies e híbridos silvestres de lavándulas.

Si queréis saber más o adquirir productos, es muy recomendable visitar Tiedra de Lavanda.

Tiedra de Lavanda

Es el primer centro de interpretación dedicado al mundo de las lavandas: Un recorrido por sus variedades, lugares y modos de cultivo, cómo se extraen los aromas o la presencia en nuestra cultura y costumbres a lo largo de la historia. Cuenta también con una tienda

No pude resistirme y caí en la tentación de hacerme una foto… os aseguro que es rarísimo que yo salga en una foto!

Conociendo Tiedra

Pero Tiedra es mucho más que su castillo o la lavanda… cuenta con otros lugares que de por si solos merecen su visita:

  • Centro Astronómico: estuvimos hace años, pero es uno de nuestros pendientes. A ver si para otra ocasión podemos visitarlo, sobre todo cuando las peques sean un poco más mayores pues lo más espectacular es ver las estrellas… y eso con horario infantil, es un poco complicado!
  • Aula de Arqueología: exhibe una interesante colección de piezas procedentes del yacimiento arqueológico de Amallóbriga.
  • Además cuenta con diferentes edificios dignos de ser conocidos como sus iglesias o el Pósito… Pasear por sus calles es una obligación si te acercas a esta coqueta localidad de los Montes Torozos.

Esta entrada tiene 3 comentarios

Deja una respuesta