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Obediencia… no

Buenas noches

Ayer curioseando por Internet, encontré una reflexión que me hizo plantearme muchas cosas y que me removió bastante por dentro.

Últimamente se está hablando mucho de feminismo, feminazis, violencia de género…

Creo que los que me conocéis personalmente o incluso los que me seguís habitualmente, sabéis que sí, me considero feminista. Y a mucha honra.

La idea tan propagada últimamente sobre si el feminismo es igual que el machismo, me irrita y cabrea bastante. No, no es lo mismo. El Machismo considera que el hombre por el mero hecho de ser hombre, es superior a la mujer. El Feminismo considera que hombres y mujeres son iguales, ninguno es superior, simplemente Iguales.

Soy mujer, tengo dos hijas, cuatro sobrinas, muchas amigas, una hermana… Pero también tengo tres sobrinos, un hermano, bastantes amigos y un marido. No quiero ni creo que unos sean superiores a otros, faltaría más!

Pero si que me encantaría que pudieran y pudiéramos ser iguales… nada más. Por igualdad no entiendo que a todos nos tenga que gustar lo mismo o a todos se nos deba dar bien todo, eso sería absurdo!

Nadie es igual a nadie, pero en derechos y deberes sí.

El problema es que nuestra sociedad no educa ni educamos para que dicha igualdad sea real.

Ni educamos para prevenir sobre los abusos o violaciones.

Muchos menores hasta que no alcanzan cierta edad, no son conscientes de que han sufrido abusos! Y por qué? Porque en la gran mayoría de los casos, dichos abusos los realizan familiares o personas muy próximas de su entorno… cómo alguien así va a hacerte daño???

Incluso muchas adolescentes y jóvenes, piensan que determinadas actitudes machistas, posesivas, son normales. Que si su “novio” se comporta así es porque las quiere… perdona???

El amor NUNCA es posesivo. El amor NUNCA te coarta la libertad ni te aleja de tu entorno.

Y si te quiere, NO pasa nada si no te acuestas con él o ese día no te apetece.

Por favor, dejemos de silenciar los abusos. Dejemos de buscar culpas en las víctimas. Dejemos de hacerlas doblemente víctimas.

Dediquemos nuestros esfuerzos y educación, para que desde pequeños, sepan decir NO y sepan que su cuerpo es SUYO, y NADIE tiene derecho a tocarles!

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